Entre el tumulto de gente que se agolpaba a mi alrededor, mis ojos se clavarón en él, su mirada sorpendida cuando me acerque, mi paso decidido, ninfa moderna, de pelo capeado y minifalda, sonrisa y maquillaje postizos... uno de tantos desconocidos atractivos a mí mirada, uno de tantos desconocidos a los que les sorpende la belleza de una venus natural, de una venus al alcance de sus manos...
Y ahora que las ansias de sexo me invaden, que el cuerpo me arde por dentro y que siento ganas de levantarme, que siento ganas de que me hagan sentir el fuego que abrasa y me eleva hasta el cielo, ahora que mis manos vuelven a explorar los rincones mas inhóspitos, los placeres carnales... ahora es cuando me doy cuenta de las miradas tímidas, de las palabras calladas, de esas invitataciones no pronunciadas...
Ahora que me vuelven a invadir las ganas, que aunque no tengo fuerzas, quiero manos que me levanten del suelo, ahora que Lilith quiere despertar de nuevo y aunque me invada este sufrimiento, quiero luchar, quiero olvidar y vivir el tiempo, más sé que esta vida se pasa lento cuando sufres, pero se pasa el tiempo... y no quiero malgastar mis días, más si Dios me condenó y al Diablo tengo en descontento, ni cielo ni infierno habrá cuando la tierra me quite los pies del suelo...
Olvidar lleva su tiempo, volver a vivir, esfuerzo, más las ganas las tengo y volveré a levantar del suelo, volveré a sonreir de fuego, volverá la bestia que llevo dentro... pues un angel de fuego, una diosa del deseo, bruja de gato negro... pues yo, Lilith, debo levantar del suelo, debo volver a ser la fantasía del sexo, debo buscar la fuerza que me haga recuperar la diosa que llevo dentro... el diablo de fuego y deseos...
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